El «Programa de Doctorado en Estado de Derecho y Gobernanza Global» apuesta por tres niveles específicos que pretenden ser sus señas de identidad:
a) su alto nivel de internacionalización;
b) su envite por reclutar doctorandos de regiones menos desarrolladas con una densidad de doctores más desfavorecida; y
c) su creencia en la necesidad de formar a profesionales que conformen cuadros superiores en instancias diferentes a las estrictamente universitarias.
El Programa de Doctorado tiene una clara orientación internacional, siendo fiel a su exitosa experiencia anterior a la hora de captar a estudiantes de muy diferentes países así como por abogar por la movilidad de éstos entre las universidades con las que se establecen relaciones de intercambio y cooperación. Si bien por la tradición existente una gran mayoría de sus estudiantes provienen de los países de América latina, el programa está también abierto a estudiantes de otras nacionalidades europeas y de países terceros. La vocación internacional coincide con las líneas y los intereses de investigación de una gran parte de su profesorado, siendo esta circunstancia un elemento relevante de sinergias potenciales.